El escolar tailandés fue rescatado con rasguños y bastante asustado.
Un niño de 8 años tuvo que ser rescatado en un colegio de Tailandia, después de que se le quedara atorada la cabeza en un hueco de la pared de su colegio.
Sathaporn Duangchaoom estaba en su escuela de Bangkok cuando intentó coger una regla que a un compañero se le había caído. Metió la cabeza por el agujero de 12 centímetros que estaba en el muro para alcanzarla pero, al intentar salir, se le quedó atrapada.
Los profesores del colegio intentaron retirarlo de la pared, untando aceite de cocina sobre su cabeza, pero ésta permanecía inmovilizada entre el cemento y el suelo. Tuvieron que intervenir unos técnicos para resquebrajar el muro mientras el niño lloraba aterrorizado. El menor fue rescatado, salió con solo unos rasguños, pero bastante asustado.
No hay comentarios:
Publicar un comentario