Si fuiste de los que vio alguna de las transmisiones de la final de la Champions League, te habrás dado cuenta que en algún momento del minuto 60 el partido se paró. ¿Qué había ocurrido? Pues que un hincha ingresó al campo con una bufanda y, tras ponérsela a Messi y abrazarlo, se fue a darle la mano a Iniesta.
Esto ocurrió antes que la seguridad del estadio se lo lleve, pero el motivo por el que la transmisión internacional decidió no pasar las imágenes es que la UEFA considera que hacer eco de situaciones como esta es alentar a que más fanáticos repitan intrusiones como esta. Además, claro está, hay muchos aficionados que buscan hacerse famosos metiéndose al campo. Y no los van a dejar.
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