Los científicos sospechaban desde hace tiempo que podía estar ahí, pero nunca habían sido capaces de demostrarlo.
Ahora, investigadores del Instituto Tecnológico de Massachusetts (MIT), la Universidad de Brown, el centro espacial Goddard de la NASA y otras instituciones han cartografiado un cráter en el polo sur de la Luna, el Shackleton, con un detalle sin precedentes y, en efecto, han encontrado evidencias de lo que parecen ser hielo en su fondo. Eso sí, en pequeñas cantitades. El hallazgo, que aparece publicado en Nature, puede ser clave si alguna vez el ser humano se decide a habitar la Luna, reseñó la ABC de España.
Los investigadores utilizaron un altímetro láser del Orbitador de Reconocimiento Lunar (LRO) de la NASA para conocer el albedo o reflectividad natural del cráter Shackleton. Los científicos descubrieron que el suelo del cráter es más brillante que el de otros agujeros cercanos, una observación coherente con la teoría de la presencia de hielo. Esta agua helada, según sus conclusiones, puede formar hasta un 22% del material dentro de una capa de una micra de espesor en el suelo del cráter.
El cráter, nombrado en honor del explorador antártico Ernest Shackleton, tiene más de 19 km de ancho y más de tres de profundidad, aproximadamente la de los océanos terrestres. Maria Zuber, principal investigadora del equipo, describe el interior del cráter como «extremadamente escarpado... No sería fácil rastrear por ahí».
El equipo utilizó el láser altímetro del LRO para medir la altura del cráter en función del tiempo que le llevó a la luz del láser rebotar de la superficie de la Luna: cuanto más tiempo se tomó, más baja era la elevación del terreno. A través de estas medidas, el grupo cartografió el suelo del cráter y la pendiente de sus paredes. Realizaro más de 5 millones de mediciones.
Terremotos lunares
Los investigadores también utilizaron el altímetro láser para medir el brillo del cráter. Era relativamente brillante, pero sus paredes lo eran más. El hallazgo fue en un primer momento desconcertante: los científicos pensaban que si hubiera hielo en cualquier lugar de un cráter, sería en el suelo, donde la luz solar penetra muy poco. ¿Cómo explicar las paredes brillantes? El equipo cree que de vez en cuando la Luna experimenta sacudidas sísmicas provocadas por colisiones o por las mareas gravitacionales de la Tierra. Tales sismos lunares pueden haber causado que las paredes de Shackleton se desprendieran revelando un suelo más brillante debajo.
Si alguna vez volvemos a la Luna, los polos pueden ser el mejor lugar donde instalarnos. Debido a la pequeña inclinación del eje de rotación lunar, contienen regiones expuestas a la luz solar casi permanentemente -necesarias para obtener energía- y otras zonas cercanas a la oscuridad eterna que contienen hielo, un recurso esencial para cualquier colonia lunar. La zona que rodea el cráter Shackleton podría ser un lugar privilegiado.
No hay comentarios:
Publicar un comentario