El juicio por las patentes entre Samsung y Apple ha puesto al descubierto los secretos mejor guardados del gigante de la manzana. La batalla jurídica ha sido una buena oportunidad para develar grandes misterios.
La compañía de Steve Jobs, además de ser una de las más exitosas del mundo, ha sido una de las más cerradas. Su departamento de diseño es uno de los más herméticos. Parece una instalación de máxima seguridad, en el cual ningún trabajador comenta en qué trabaja y donde cada producto es un enigma hasta ser presentado oficialmente a sus clientes.
Jobs, su fundador, estaba obsesionado con el secretismo. Pero el proceso jurídico por las patentes contra Samsung esta sacando a la luz muchos secretos y trayendo abajo otros mitos.
Sin embargo, hoy en día, la opinión pública puede apreciar más de cien páginas de imágenes de modelos de iPhone e IPad. Se puede ver cómo los diseñadores de Apple luchaban para darle forma definitiva al dispositivo.
Se conoce que los directivos de la empresa prefieren hacer cuestionarios a los clientes, en vez de imponer lo que ellos mismos suponen correcto. El grupo pensó en un iPad de menor tamaño antes de que Jobs considerase "muertos antes de nacer" aparatos más pequeños.
Apple tuvo que proporcionar una gran cantidad de material a Samsung durante el proceso. Entre ello, se encuentra más de dos mil mails de Steve Jobs, lo cual en opinión de los abogados de los surcoreanos es muy poco. Estos correos han pasado a ser parte de los pruebas del proceso, que en Estados Unidos normalmente se pueden consultar a la opinión pública.
Pero las partes involucradas trataron de que los documentos fuesen confidenciales, a pesar de esto perdieron ante la jueza Lucy Koh y a pedido de la agencia de noticias Reuters. Con las informaciones de Apple, Samsung quiere manifestar que su rival estadounidense también sigue los pasos de la competencia. Incluyendo que el iPhone y el iPad se inspiraron en diseños ajenos.
Hasta el momento, este argumento solo se ha mostrado de forma relativa. Las primeras contemplaciones le han dado la razón a Apple. Cuando el diseñador Christopher Stringer contó al jurado la forma en que su equipo hace malabares en la “mesa de la cocina”, así da la impresión que comunica la marca: "cool", moderno y algo moderno.
Los distintos prototipos del iPhone dan, de lo contrario, una muestra de este esfuerzo de los diseñadores para conseguir el objeto perfecto, más no demuestran que se tratase de ideas robadas.
Los secretos develados son el precio que Apple esta pagando por objetar la acusación de que ha robado ideas. Y esto también debió saberlo Jobs, quien se preocupaba de mantener el sincretismo dentro de la compañía, pero finalmente estaba claro que por lo menos Samsung tendría acceso a la vida interna de Apple.
Por otro lado, Tim Cook, el actual jefe de la empresa y quien se encargó de esta luego de la muerte de su fundador, ha dejado en claro que se encuentra a favor de una mayor apertura. Apple reaccionó ante las acusaciones de las malas condiciones de trabajo en China ingresando a una organización controladora independiente y publicando la lista de sus suministradores.
El sincretismo se mantiene intocable sólo en los nuevos productos. En la sala de juicio, Phil Schiller, el jefe de marketing, se negó a responder a los abogados de Samsung acerca del diseño del nuevo iPhone. Es por esto, que hasta ahora no se sabe si las nuevas fotografías del iPhone que aparecen en la web son ciertas o no.
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